El
término y a su vez el concepto de Música Colombiana aunque es innegable la
carga histórica que conlleva, ha sido replanteado y resignificado desde los
años 90, a partir de una pregunta que aun hoy no resulta fácil de responder desde
una perspectiva social y cultural. ¿Cuál es la música colombiana? O mejor ¿Qué
es música colombiana? Pues bien, sobre este álgido debate deseo expresar mi
perspectiva como sociólogo y como alguien que tiene una postura frente al tema,
construida desde las músicas que escucha.
En los
años 50, (denominada por muchos como la
época de oro de la música de la región andina colombiana) se entendía que
la música de la región andina del país era la MÚSICA COLOMBIANA (lo pongo en mayúsculas para resaltar lo
grande del concepto para un país que tiene tantas músicas) desde una lógica
centralista, dado que en esta zona se dirige el país en términos políticos,
económicos y sociales, por lo tanto de la música autóctona de esta zona debía
de ser la música nacional. Así mismo era la música que se exportaba, de ahí que
compositores como Jose A Morales fueran conocidos en muchas partes del mundo. Así
mismo, hay que recordar las giras internacionales de Pedro Morales Pino con la
Lira Colombiana o Los hermanos Hernández, entre otros, desde principios del
siglo XX. Lo que generó que en muchos países se conocieran más bambucos que
currulaos por ejemplo. Aunque ritmos como la cumbia también hacían camino en
escenarios internacionales, sin duda la que era reconocida como la música
colombiana era de la región andina.
De ahí,
que hasta hoy, son muchísimas personas que hacen referencia a la música andina
colombiana hablan de Música Colombiana. En mi opinión (y en la de muchos otros)
esto genera una que las músicas de otras regiones sean desconocidas o vistas de
forma peyorativa. Pregunto: Acaso, ¿La música del pacífico no es música
colombiana? ¿Esa cantidad de ritmos del caribe colombiano, no son música
colombiana? Y ni hablar de toda la construcción cultural alrededor de la música
que tenemos en los llanos. Por eso, creo que hablar de MÚSICA COLOMBIANA como
un solo género es no solo peyorativo, sino negador de la inmensa riqueza
cultural del país.
Por
fortuna desde los años 90 se acuñó el término Música Andina Colombiana, para
reconocer este género que agrupa a cerca de 21 ritmos oriundos de nuestra
extensa región montañosa. Esto no significa que se quiera rotular para hacerla
más pequeña, sino darle el reconocimiento necesario para un país que está lleno
de músicas. Creo que finalmente en eso radica el concepto de lo colombiano, en
la diversidad, pero que es entendida como agente unificador. Es decir, que la
diversidad cultural es lo que nos hace colombianos, no los regionalismos o
creer que un sector es más importante que otro.