El debate quizás estaría más que en sobre lo bueno o lo malo de la comercialización, en ¿Cuál es la calidad de lo comercial? Con esto quiero indicar que no importa que una propuesta musical se vuelva comercial o no, sino que lo importante es que sea de buena calidad interpretativa e instrumental lo que permitiría al consumidor (comprador) escuchar buena música y al músico recibir ingresos por su trabajo. Lo cual no siempre es así, porque muchos intérpretes reciben ingresos por ventas sin ser de muy buena calidad mientras que los músicos que se esmeran por hacer un buen trabajo musical no venden porque no son muy conocidos, de ahí la importancia de tener una proyección comercial equitativa para que el oyente pueda escoger más.
Esta perspectiva no cambia mucho para la MAC (Música Andina Colombiana) porque es una música no muy comercial pero de gran calidad interpretativa e instrumental, y estas producciones terminan en manos de unos pocos que para ser sincero no somos los necesarios para que el artista reciba una cantidad de ingresos proporcionales al esfuerzo de producir su disco de forma independiente.
También hay que decir que hay algunos grupos de MAC que se están esmerando por hacer más comercial este género musical, lo cual más que importantísimo resulta necesario, para mostrar que lo andino aun está vivo en las músicas tradicionales del país. El grupo que en mi criterio más le apostado a la difusión comercial de su propuesta es un grupo personalmente no solo está dentro de mis favoritos, sino que los admiro profundamente, precisamente por querer evidenciar todo lo que pasa con los nuevos lenguajes andinos, estoy hablando de OÍ (compuesto por Juan Consuegra, Fáber Grajales y Luis Fernando Hermida), quienes han realizado una labor casi titánica de mostrar la MAC en medios de comunicación, con otros públicos y en otros espacios que no estaban muy abiertos para la MAC. Bien por ellos, porque con esto le dan un enfoque comercial a un propuesta musical bien hecha y que tiene toda la validez para ser reconocida comercialmente, porque no podemos seguir pensando que el trabajo del músico es por amor al arte no más, ellos igual que todos nosotros viven de su profesión, por eso mismo hay que apoyarlos no solo comprando sus trabajos, sino difundiendo los mismos para que otras personas también puedan comprarlos.
Como conclusión, quiero reconocer la necesidad que tiene la MAC de hacerse más comercial, para que se difunda más para mostrar que la música elaborada y académica si puede tener un público amplio, y como se dijo en la anterior entrada, pueda recuperar su esencia popular
No hay comentarios:
Publicar un comentario